Hace unos años, me encontraba en una situación muy similar a la que quizás estés viviendo ahora: desmotivada y frustrada con mi cuerpo. Cada vez que me subía a la balanza, los resultados no eran los que esperaba. Probé innumerables métodos y dietas para bajar de peso, pero nada parecía funcionar. Con el tiempo, me di cuenta de que el problema no estaba en los métodos, sino en mí misma. Intentaba hacer todo al mismo tiempo: comer sano, hacer ejercicio, practicar ayuno, seguir dietas, contar calorías, entre otras cosas. Pero no tenía una dirección clara, solo seguía los consejos que veía en las redes sociales sin entender realmente el porqué de cada acción. Estaba buscando resultados rápidos, pero sin un plan adecuado. ¡Qué gran error!